Hay algo que jamas te podran quitar, tus recuerdos.

Cuando se va, piensas que es mejor que no hubiese entrado en tu vida, asi te ahorrarias el echarle de menos, el dolor. Pero, cierra los ojos. Recuerda el primer día que lo conocistes, recuerda la primera vez  que te hizo reir a carcajadas, recuerda la primera vez que pensastes que era él y solo él. No puedes evitar sonreir, aunque se haya ido. Sin embargo ahora borra todo lo que has pensado, borra cada recuerdo bueno que te ha regalado... así, no hay nada, borralo todo. ¿ Ves ? Has dejado de sonreir, porque aunque ya no esté, nadie puede quitarte esos recuerdos, son tuyos. ¿ No crees que merece la pena haberlo vivido ?

Punto, pero seguido.

Un tiempo, un aire, una vuelta, un descanso, un parentesis. Una situación de incertidumbre, sé que no estamos juntos, no eres mio, pero yo me siento tuya. Te he esperado, aun cuando no te lo merecias. Te he esperado porque sé que merece la pena. Y aunque ahora no podamos, no confies o no sientas, yo sigo aquí. Pero algo ha cambiado, te espero, si, pero ya no cerraré ninguna puerta más por tí. Espero que el día que vengas a buscarmen, esa puerta no haya sido cerrada por otro que supo valorarme antes de perderme.

¿Fin?

Ha acabado. Lo sabes. Y lo que es peor, lo sientes. Lo ves ya  nada es como antes, su indiferencia te mata, pero finges que tu también lo ignoras. Cuando el no mira, le miras. Lo ves reir, feliz, con sus amigos y te preguntas qué falló. Que hicistes para que no te diera la oportunidad. La oportunidad de conocerte realmente, la oportunidad de demostrarle quien eres, la oportunidad de ser tu quien dibuje sonrisas en su cara.

Tenemos la capacidad de destruir lo que construimos nosotros mismos.

Se supone que te da igual, supones que no me importa nada. Supuestamente este es el fin. De algo que empezó tal como acaba. Suponiendo que hay algo, suponemos que olvidamos. Suposiciones erróneas. Supusimos demasiado.

Aún, TÚ.

  Es lo que hacemos todos: nos lanzamos, y esperamos poder volar. Porque si no es así, caeremos como piedras. Y durante la caída nos preguntamos: ¿se puede saber por qué he saltado? Pero aquí estoy, cayendo. Y sólo hay una persona que puede hacerme creer que vuelo: y eres tú.

Moderm family.

El mundo está dividido en dos grandes grupos de personas, los realistas y los soñadores. La mayoria de las veces son los realistas los que acaban abriendo los ojos a los soñadores y derrumbando sus sueños. Pero algo maravilloso pasa cuando es al contrario, cuando un realista sueña y cree en sus sueños. Porque alfin y al cabo los dos se necesitan, se complementan. El realista no permite que el soñador vuele tan alto y se queme con el sol y los soñadores... los soñadores hacen que los realistas en ocasiones vuelen, ya que por si solos no llegarian a despegar.

Lo importante no es mirar, sino ver.

Supongo que podría estar bastante furiosa con lo que me pasó, por todas la veces que algo no me salió bien o me decepcionaron. Pero ¿sabes?  cuesta seguir enfadada cuando hay tanta belleza en el mundo. A veces siento como si la contemplase toda a la vez y me abruma, mi corazón se hincha como un globo que está a punto de estallar. Pero recuerdo que debo relajarme y no aferrarme demasiado a ella, y entonces fluye a través de mí como la lluvia y no siento otra cosa que gratitud por cada instante de mi estúpida e insignificante vida. No tienen ni idea de lo que les hablo seguro, pero no se preocupen, algún día la tendrán.