viernes, 4 de mayo de 2012

Sentir.




Y derrepente pasa, pasa algo que estabas esperando desde la primera vez que lo vistes, pasa lo que estabas deseando, pero ahora lo que te invade no es el deseo ni las ganas, sino el miedo... miedo de que de nuevo te ilusiones y se vuelva a ir, de que se vaya tan rápido como llegó. Entonces te das cuenta que merece la pena, merece la pena sentir ese miedo porque así sabes que te importa, y en esta vida amigos, es más importante querer a que te quieran, porque no hay cosa más bonita que saber que a pesar de todo, todavia eres capaz de sentir.

No hay comentarios:

Publicar un comentario